Pido disculpas por mi ausencia en el último mes, supongo que se habrá notado poco pero para los que sí os hayáis dado cuenta, creía conveniente aclarar que no me había quedado atrapada dentro de una muñeca idéntica a mí sin posibilidad de escapar, y lo que es peor: ¡¡¡de bloguear!!!
Os seré sincera diciendo que no vuelvo con ninguna idea brillante sacada de la manga. Ni que este tiempo apartada del mundo virtual ha sido un tiempo de reflexión e introspección en mí misma. No. Simplemente han sido unas semanas en las que la vida ha hecho conmigo lo que le ha dado la gana, aunque se supone que eso es lo que pasa siempre. En fin, a la espera de que ese sentimiento guerrero vuelva a despertar en mí, os dejo con esta revelación:
Hay cosas en la vida que no se pueden controlar, pero eso no quiere decir que tengas que dejar que esas cosas te controlen.
Vuestros comentarios hacen de este blog algo más
viernes, 18 de marzo de 2011
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
En serio? no estabas? no me había dado cuenta...;) me gusta la frase, sí señora! bienvenida de nuevo a la blogosfera! =)
ResponderEliminarLo intentaremos!=)
ResponderEliminar